Donald Trump se convirtió este miércoles en el tercer presidente estadounidense de ir a un juicio político en el Senado.
La mayoría de la Cámara de Representantes votó hoy a favor de las acusaciones de abuso de poder y obstrucción al Congreso.
Ahora, en el juicio en el Senado, la Cámara Baja actuará como fiscal en el proceso, a través de los representantes del cuerpo, quienes expondrán las razones por las cuales consideran que el mandatario debe ser declarado culpable.
En el senado, el juez será el presidente de la Corte Suprema de Justicia, John Roberts, quien presidirá las audiencias.
Por otro lado, el jurado estará compuesto por 100 senadores, quienes votarán si absuelven a Donald Trump o lo condenan.
Para la condena, 67 senadores deberían votar en su contra. Algunos indican que al, al parecer, será improbable la condena, puesto que 53 senadores son republicanos, que se muestran firmen de votar en contra a favor de la destitución de Trump.
¿Qué se hará?
Los senadores deben discutir cómo será el proceso: cómo se presentarán las declaraciones, qué tiempo tendrán las partes para exponer sus casos, además, si se admitirán testigo o no.
El líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, propuso una hoja de ruta a seguir. Indicó que la primera audiencia sería el 6 de enero para debatir las reglas.
El día 7 el juez John Roberts jurará como presidente de esa cámara, de acuerdo a la Constitución, así como los senadores.
El cargo del jefe del Senado lo ocupa el vicepresidente del país, Mike Pence, pero la Carta Magna establece que en caso de “impeachment” sea el presidente del Tribunal Supremo quien asuma el puesto.
El plan esbozado por Schumer estipula, además, que 9 de enero se reconozca el mandato concedido a los legisladores elegidos por la Cámara Baja para que actúen de fiscales en el juicio político en el Senado y que a partir de ahí tengan un máximo de 24 horas para exponer sus argumentos.
La declaración de los “fiscales” estaría seguida de la del abogado del presidente, que también tendría una duración máxima de 24 horas.
La hoja de ruta sugiere que el Senado no delibere más de 24 horas antes de la votación de los cargos políticos contra Trump, que posiblemente no serán aprobados debido al predominio republicano en esta cámara.
Uno de los puntos más polémicos de la propuesta de Schumer es la comparecencia de nuevos testigos en el Senado, aparte de los que ya han declarado frente a los comités de la Cámara Baja durante la investigación de juicio político.
“Un juicio justo y rápido, eso es lo que propongo”, dijo Schumer en la rueda de prensa, según reportó la agencia de noticias Efe en aquel entonces. EFE
