Unos cinco puentes peatonales, de los más utilizados en el Gran Santo Domingo, se encuentran en condiciones de vulnerabilidad y un peligro inminente para sus peatones y los vehículos que se movilizan debajo de ellos, tres de estos están a la espera de la intervención anunciada por el Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC), sin que se haya precisado el monto de inversión.
El puente peatonal ubicado en la intersección de la avenida Máximo Gómez con 27 de Febrero, se encuentra abandonado, deteriorado y debajo ha sido invadido por vendedores ambulantes y mendigos que “residen” y realizan sus necesidades en el lugar.
En esa misma situación se encuentra el puente localizado en la intersección de la avenida Máximo Gómez con la avenida John F. Kennedy, cuyas cuerdas metálicas que sirven para sostenerlo se han roto completamente. También el puente vehicular Ramón Matías Mella, que empalma con la avenida México con la avenida 25 de Febrero en la Zona Oriental, presenta vicios de construcción y oxidación en sus estructuras metálicas y el puente Paseo de los Reyes Católicos, en La Zurza, que de lejos refleja carencia extrema de higiene. Este último se ha convertido en un vertedero de alimentos, donde la pestilencia y el desorden son las características principales. Los tubérculos que allí se comercializan ruedan por el piso entre el lodo, el excremento de animales y el estancamiento de agua sucia. Los ciudadanos se quejan de que estos medios que sirven de protección al peatón han sido olvidados y temen que alguien sea afectado físicamente por su deterioro.
“Yo paso siempre de día y realmente hay que limpiarlo y darle condiciones para no se caiga, porque a diario pasan muchas personas por aquí, adultas y niños. También a los carros que pasan debajo les pueden caer un pedazo de hierro”, dijo Deyanira De León.
En situación crítica y clausurado, pero usado como medio de publicidad con una pantalla gigante, está el puente próximo al Hospital Central de las Fuerzas Armadas en la avenida Ortega y Gasset.
Este tiene un letrero de advertencia y peligro que precisa lo siguiente: “favor no utilizar este puente, ya que el mismo representa un peligro, debido a los cables que pasan por encima del mismo, atentamente CDEEE”. A pesar de esto las autoridades no intervienen, retirándolo o remozándolo.
Proyecto de la MOPC
En noviembre de 2018, Obras Públicas anunció el “Proyecto Reparación de Puentes en el Distrito Nacional y Provincia Santo Domingo”, donde señalaban las especificaciones técnicas para la readecuación de estas plataformas previamente mencionadas, pero no los han iniciado.
“Los puentes peatonales de las intersecciones Av. Máximo Gómez con Av. 27 de Febrero y Av. Máximo Gómez con Av. John F. Kennedy, fueron construidos en el año 2003, y desde entonces no han recibido el mantenimiento preventivo correspondiente. El uso y el impacto del ambiente en el tiempo, han contribuido al deterioro progresivo de varios componentes de las estructuras de acero”, explica la institución en el informe.
Puentes en la Gómez y 27 de Febrero
El MOPC indica que el alcance del proyecto de recuperación consiste en la reparación integral de los puentes peatonales de las intersecciones avenida Máximo Gómez con Avenida 27 de Febrero y Avenida Máximo Gómez con Avenida John F. Kennedy, con el propósito de “garantizar la seguridad” de los usuarios peatonales, de automotores y del Metro de Santo Domingo que circulan por ambas intersecciones, para aumentar la vida útil a un nuevo período de diseño y mantener agradable la estética paisajística del entorno de ambas infraestructuras.
Fuente: El Caribe
